Al rebasar los 5 metros y 21 centímetros en su penúltimo intento, el estudiante del Instituto Tecnológico de Tijuana, Jorge Luna, impuso una nueva marca en el salto con garrocha en la Universiada Nacional UANL 2017.
El estudiante de Ingeniería Civil participó en su segunda Universiada Nacional; la primera fue también aquí en la edición 2015 que organizó la UANL, para volver a ganar el oro.
Jorge, de 20 años, llegó mentalizado en rebasar su propia marca personal de 5.35 metros que logró hace tres semanas en el Triton Invitational de la UCSD (Universidad de California en San Diego, Estados Unidos).
“Hoy mi tirada era superar mi marca, pero las condiciones no se me dieron”, dijo en entrevista el tijuanense.
Jorge considera que con su marca personal recién obtenida y con el oro que ganó hoy en la Universiada, aspira a un lugar directo en la Universiada Mundial que se celebrará en Taiwán del 19 al 30 de agosto. Para la justa internacional le pedían superar los 5.30 metros.
“Considero que sí soy apto para participar en la Universiada Mundial. No he competido mucho este año, pero me voy contento con este nuevo récord de Universiada. Ya estoy muy constante arriba de los 5.21 metros”, comentó.
El próximo mes participará en el campeonato mexicano Sub 23. Ahí el récord mexicano es de 5.60 metros. Otra marca que tiene en mente superar. Este es el plan de 2017, pero Jorge incluso ve más allá, pues también piensa en continuar su crecimiento individual y en los próximos tres años poder dar la marca de 5.70 metros que le piden para calificar a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
“Me faltan 25 centímetros (para el Sub 23). Luego para Olímpicos me piden 5.70, ahí me faltan 35 centímetros. Pero creo que en tres años es muy viable. Tengo que seguir trabajando, mejor entrenamiento y preparación”, planteó.
La plata en el salto con pértiga la ganó Víctor Manuel Castillero de la UANL con una marca de 4 metros y 90 centímetros. El bronce lo ganó Ricardo Silva de la Universidad Anáhuac de Querétaro con una marca de 4 metros y 45 centímetros.
Por: Jhovanni Zarazúa